Vivir en la periferia puede ser demasiado agradable o totalmente aborrecible. Provoca efectos contradictorios dentro de nuestros estados de animo. Cuando se trata de un paseo en bicicleta o una gran bocanada de aire puro es lo mejor, pero cuando se trata de trasnoche o estudios es lo peor.
Intenta salir de Peñaflor a las 6 de la mañana... Totalmente ASQUEROSO!!!...Considerando que todo el mundo sale a trabajar o estudiar a Santiago, es horrible y si a eso le sumas choferes mal genio y tener que pagar con efectivo, la mezcla perfecta para empezar mal el día.
Cuando era adolescente, de esas rebeldes sin causa me encantaba pasearme por toda la comuna a las tantas de la madrugada y jamas me paso algo, eso porque seguíamos siendo un minúsculo punto dentro del mapa: pocos habitantes, sin semáforos, aun con calles de tierra, dos supermercados de pueblo, etc. En cambio ahora, claramente existe una sobrepoblación y además un abuso de empresarios que estan poniendo supermercados en todas partes.
A pesar de todo espero poder mantenerme en este "pueblito" la mayor cantidad de tiempo posible-viviendo claro está- aunque pase 6 de los 7 días de la semana en Santiago, aunque eso es una ventaja pues cada vez que llego a mi casa amo poder vivir lejos de tantos edificios que no me dejan ver el cielo, lejos de tantas avenidas llenas de bocinazos, lejos de tantos semáforos.
Pero veamos el vaso medio lleno que es la parte que mas me gusta. Hoy salí a andar en bicicleta y esa calma con la que puedes transitar por estas calles es genial, sé que no es única, pero para mi es como si lo fuera. Con la llegada de la primavera es la mejor combinación para relajarse un poco.
Seguiré saliendo cuidando siempre mi rodilla y de a poco iré incluyendo mas accesorios para vivir mejor, pronto será con un libro.
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