"Me duelen los pies, tengo ampollas, sabe por qué mijita"- me dijo el vagabundo. "Porque he caminado 4.000 km. y ahora me tengo que devolver para atrás" y sonrió con los ojos brillosos de sufrimiento.
"¿Conoce las ruedas? Así es la vida uno parte aquí arriba y tiene que teerminar donde mismo"
"Allá conocí a mi mujer hace 25 años, ¿Conoce el cerro San Cristóbal? Ahí subiendo nos dimos el primer beso, pero como digo yo, "le robé un beso".
"¿Me haría un favor? ¿Me puedo despedir de ud. en alemán?...Auf Wiedersehen. No me gusta el inglés, le puedo hablar en Francés: je parle français, italinano o potugés, pero no inglés" Me dijo mientras me apuntaba con tono grave en su voz.
(...)La verdad, es que quedé maravillada con ese señor que se marcho diciéndome que se iba a comprar una cachantún y que no me pidió ni una sola moneda, solo quería hablar y contar lo que sabía de la vida.
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